Aceites corporales
Los aceites corporales son un producto cosmético diseñado especialmente para nutrir al máximo la piel de nuestro cuerpo. Uno de sus efectos mas determinantes es que actúa sobre la dermis proporcionando una hidratación profunda.
Los mejores aceites corporales también nos ofrecen una gran cantidad de beneficios adicionales, como son protegernos la piel de los rayos solares, combatir la sequedad de la piel a causa del frio.
Asimismo, también podremos encontrar aceites corporales de farmacia especializados en otros ámbitos: combatir la celulitis, eliminar cicatrices, reducir estrías o reafirmar nuestra piel.
Ventajas de utilizar aceites esenciales corporales
Con el paso del tiempo vamos perdiendo los ácidos grasos que protegen nuestra piel y, con el uso de los diferentes tipos de aceites corporales protegemos y reparamos la superficie cutánea. Estos aceites evitan la pérdida de agua, mientras que su alto contenido en grasas ayuda a restaurar cualquier tipo de piel, manteniéndola siempre nutrida y bien hidratada.
La densidad de los aceites hidratantes corporales hace que su aplicación por nuestra piel sea mucho más fácil y fluida. De este modo, apostando por los aceites, cubrimos nuestra piel corporal de manera más fácil, utilizando menos producto.
Dicho de otra manera, los aceites corporales hidratantes suelen cundir más que las cremas hidratantes, de las que necesitas más producto para cubrir todo tu cuerpo.
Estos aceites puedes incorporarse en nuestra rutina diaria como complemento a nuestros productos de cuidado de la piel. En cualquier Farmacia F+ Online podrás encontrar los mejores aceites corporales que se adapten a tu piel.
Si buscas alternativas naturales, los aceites corporales naturales cumplirán con tus expectativas. Nuestros productos están realizados mayoritariamente de manera orgánica.
Contarás también con la ventaja de poder consultar cualquier duda o inquietud con tu farmacéutico de confianza para poder llevar a cabo la mejor solución para ti.
Lo más vendido en aceites
Preguntas frecuentes de aceites
Los productos naturales de farmacia son aquellos elaborados a partir de ingredientes de origen natural, como plantas, minerales o productos animales, que se utilizan para mejorar la salud y el bienestar. Estos productos incluyen una amplia variedad de opciones como complementos alimenticios, infusiones, aceites esenciales, cremas y ungüentos, todos ellos formulados sin aditivos químicos sintéticos. Los productos naturales se valoran por sus propiedades terapéuticas y por ofrecer una alternativa más suave y respetuosa con el organismo para tratar diferentes afecciones o mantener el equilibrio del cuerpo.
Para que un producto se considere natural, debe estar compuesto principalmente por ingredientes de origen natural, como extractos de plantas, aceites esenciales, minerales o componentes animales, sin la presencia de sustancias químicas sintéticas o artificiales. Además, el proceso de elaboración de estos productos debe respetar el medio ambiente, evitando el uso de pesticidas, herbicidas o fertilizantes químicos en las materias primas. También es importante que los productos naturales no contengan conservantes, colorantes, o perfumes sintéticos, lo que los hace más seguros y suaves para el uso diario.
Entre los productos naturales más vendidos en farmacia se encuentran los complementos alimenticios como las vitaminas y minerales de origen vegetal, los probióticos para la salud digestiva, y los aceites esenciales para aromaterapia y cuidado personal. También son muy populares las infusiones y tés medicinales, especialmente aquellos que ayudan a la relajación, el sueño o la digestión. Además, los productos tópicos como cremas y ungüentos a base de plantas, utilizados para aliviar dolores musculares o problemas de la piel, tienen una alta demanda debido a su eficacia y menor riesgo de efectos secundarios.
La principal diferencia entre un producto natural y un medicamento radica en su composición y en la forma en que son regulados. Los productos naturales están compuestos por ingredientes de origen natural y se utilizan para mejorar el bienestar general, apoyar la salud o tratar afecciones leves de manera complementaria. No requieren receta médica y su regulación es menos estricta. Por otro lado, los medicamentos son productos farmacéuticos que contienen principios activos específicos, tanto naturales como sintéticos, diseñados para tratar, prevenir o diagnosticar enfermedades. Estos deben pasar rigurosos controles de calidad y eficacia antes de ser aprobados por las autoridades sanitarias.
Los medicamentos de origen natural se clasifican en varias categorías según su composición y uso. Una de las principales categorías es la de los fitofármacos, que son medicamentos elaborados a partir de extractos estandarizados de plantas medicinales con propiedades terapéuticas comprobadas. Otra categoría son los homeopáticos, que se basan en el principio de la dilución y son utilizados en terapias alternativas. También existen los productos biológicos, que incluyen medicamentos derivados de organismos vivos, como vacunas o ciertos tratamientos para enfermedades crónicas. Estos medicamentos, aunque de origen natural, deben cumplir con estrictos estándares de seguridad y eficacia antes de su comercialización.