Si alguna vez has oído hablar del código de prestación ortoprotésica (CPO) y te has quedado con cara de “¿y eso qué es?”, no te preocupes, estás en el sitio adecuado. En este artículo vamos a desgranar paso a paso qué significa este código, cómo funciona el sistema de financiación para estos productos sanitarios, qué tipos existen y cómo puede ayudarte esta información si eres paciente, farmacéutico o simplemente alguien que necesita material de ortopedia.
¿Qué es un código de prestación ortoprotésica?
Un código de prestación ortoprotésica (también llamado CPO) es una clave alfanumérica que identifica un producto sanitario financiado por el Sistema Nacional de Salud (SNS). Este código sirve para estandarizar, clasificar y tramitar la asistencia sanitaria cuando se necesita un artículo de material ortoprotésico, como una prótesis, una órtesis, una silla de ruedas o unas plantillas ortopédicas.
Este código incluye información clave sobre el producto:
- Qué tipo de producto es (silla, inmovilizador, férula…)
- Si es a medida o prefabricado (conocido como tipo de elaboración)
- Cuánto dura su vida útil (vida media en meses)
- Cuál es su IMF (Importe Máximo de Financiación)

¿Para qué sirve el CPO?
El CPO permite al paciente acceder a ciertos productos ortoprotésicos financiados en la farmacia o en establecimientos ortopédicos autorizados. Gracias a este sistema, parte o la totalidad del coste puede estar cubierto por el sistema público, dependiendo del producto, la comunidad autónoma y la situación del paciente.
Para los profesionales sanitarios, también es fundamental, ya que permite gestionar correctamente la solicitud del producto, confirmar que está incluido en la cartera común de prestaciones ortoprotésicas, y garantizar que el paciente recibe un artículo adecuado a su necesidad clínica y con respaldo financiero.
¿Qué productos están incluidos en los códigos de prestación ortoprotésica?
El catálogo oficial incluye cientos de productos clasificados según su uso. Algunos de los más habituales son:
- Sillas de ruedas (manuales o eléctricas)
- Inmovilizadores de rodilla, tobillo o codo
- Órtesis de tronco o extremidades
- Prótesis externas (como una prótesis mioeléctrica de brazo)
- Calzado ortopédico a medida
- Plantillas personalizadas
Cada uno tiene un código propio y unas condiciones específicas de financiación, incluyendo su duración estimada y el importe máximo que cubre el SNS.
Como ejemplo, aquí tienes la silla de ruedas Breezy 90 de Sunrise Medical. Este producto tiene el código de prestación SRM0440A y su elaboración es BAS.
¿Dónde se consigue un producto ortoprotésico financiado?
Depende del tipo de producto:
- Los productos prefabricados o de baja complejidad pueden obtenerse directamente en farmacias que cuenten con sección de ortopedia autorizada.
- Los productos a medida o de alta complejidad deben solicitarse en ortopedias técnicas acreditadas.
En cualquier caso, lo mejor es consultarlo con tu farmacia de confianza, donde podrán indicarte si pueden tramitar el producto o derivarte al establecimiento adecuado.
Tipos de elaboración: ¿cómo se clasifican los productos ortoprotésicos?
Los productos ortoprotésicos financiados se agrupan por tipo de elaboración, que define el nivel de personalización y el proceso de fabricación o adaptación. Esta clasificación afecta a la gestión de la financiación, el tiempo de entrega y la complejidad del trámite:
- BAS – Ajuste básico: producto estándar sin modificaciones.
- ADAP1 / ADAP2 / ADAP3 – Adaptación individualizada al usuario:
- ADAP1: adaptación de complejidad baja
- ADAP2: adaptación de complejidad media
- ADAP3: adaptación de complejidad alta
- MED – Elaboración a medida: fabricado específicamente para las necesidades físicas y funcionales del paciente.
- COMP0 / COMP1 / COMP2 / COMP3 – Componentes, accesorios o recambios clasificados por su complejidad.
- EMP0 – Componentes externos de implantes quirúrgicos dispensados directamente por la empresa fabricante.
Aquí debajo puedes ver la rodillera NPOS136 de la marca PRIM, que es de elaboración tipo BAS y su código de prestación es el OIR010A.
¿Qué es la IMF y por qué es importante?
La IMF o Importe Máximo de Financiación es el límite económico que el SNS cubre por un determinado tipo de producto ortoprotésico. Si el coste real es inferior a ese límite, el SNS lo cubre totalmente. Si es superior, es posible que el paciente deba abonar la diferencia, siempre y cuando la normativa autonómica lo permita.
Este importe está fijado a nivel estatal y es común para todo el país, aunque cada comunidad puede aplicar diferentes fórmulas de copago o tramitación.
¿Cómo están organizados los códigos?
Los códigos CPO siguen una estructura alfanumérica que identifica la categoría del producto y su variante. Por ejemplo, un código como SRM000A
se interpreta así:
- S: categoría general (Sillas de ruedas)
- RM: subcategoría (Rueda Manual)
- 000: referencia numérica del tipo base
- A: variante concreta dentro de ese tipo (ej. peso máximo del usuario, medidas especiales…)
Además, cada modelo comercial concreto homologado por el Ministerio tiene su propio código único de producto (de 8 caracteres), que se usa para la facturación o entrega.
¿Cómo saber si un producto está financiado?
Existen varias formas:
- Consultar el Catálogo Común de Prestación Ortoprotésica publicado por el Ministerio de Sanidad.
- Revisar el catálogo ortoprotésico de tu comunidad autónoma, que normalmente recoge la misma información adaptada al ámbito regional.
- Preguntar directamente en tu farmacia o centro ortopédico autorizado, que pueden consultar el listado actualizado o acceder al sistema de tramitación.

¿Qué necesitas para solicitar un producto con CPO?
Normalmente, para solicitar un producto con CPO vas a necesitar:
- Prescripción médica con el código correspondiente del catálogo común.
- Informe clínico, en los casos en que el producto así lo requiera (por ejemplo, productos a medida o especiales).
- Tramitación administrativa: puede ser mediante dispensación directa o sistema de reintegro, según la comunidad autónoma.
En algunas regiones, el paciente adelanta el pago y luego solicita el reembolso. En otras, el producto se entrega directamente sin coste adicional o con una pequeña aportación.
Conclusión
Comprender el funcionamiento del código de prestación ortoprotésica (CPO) te permite ahorrar tiempo y evitar errores o costes innecesarios. Ya seas paciente o profesional sanitario, conocer cómo se clasifican los productos financiados, qué implica su código, y qué pasos debes seguir para solicitarlos te ayuda a gestionar mejor esta prestación sanitaria.
Si tienes dudas sobre tu caso concreto, lo mejor es que lo consultes en tu farmacia u ortopedia autorizada, donde podrán orientarte según tu comunidad autónoma y tus necesidades específicas. Porque al final, lo importante es que tengas acceso al producto que necesitas, de forma sencilla y con garantías.
Preguntas frecuentes sobre los códigos de prestación ortoprotésica
¿Un mismo producto puede tener diferentes códigos?
Sí. Un mismo tipo de producto puede estar disponible en diferentes versiones según el modelo, el tamaño o el tipo de elaboración. Cada una de esas versiones tiene un código CPO distinto, por lo que es importante asegurarse de utilizar el que corresponde exactamente al producto que necesita el paciente.
¿Se puede renovar un producto antes de que acabe su vida útil?
Solo si hay una justificación clínica. La vida útil indica el tiempo estimado que debe durar el producto financiado (por ejemplo, 36 meses). Si por causa médica o deterioro no imputable al uso el producto debe renovarse antes, se puede solicitar con el informe adecuado.
¿Los productos financiados están disponibles en cualquier farmacia?
Depende. Algunos productos básicos sí pueden pedirse en farmacias autorizadas, pero otros (especialmente los que requieren adaptación o fabricación a medida) deben gestionarse a través de centros ortoprotésicos especializados. Lo ideal es preguntar en tu farmacia de confianza.
¿Cómo sé si un producto ortoprotésico está financiado por el SNS?
Puedes consultarlo en la farmacia, a través del listado de códigos CPO de tu comunidad autónoma o en la documentación médica que lo acompañe. Muchos productos están clasificados por zona corporal (rodilla, tobillo, codo…) para facilitar la búsqueda.
¿Qué necesito para solicitar un producto con código CPO?
Lo habitual es contar con una receta médica que incluya el producto prescrito. En algunos casos, si el producto es más complejo o se hace a medida, también se requiere un informe clínico. Una vez aprobado, se gestiona la financiación y el encargo del producto.

Jorge Salas Ruiz es farmacéutico y experto universitario en ortopedia técnica y farmacia clínica. Actualmente trabaja como consultor de oficina de farmacia para Grupo Hefame. Descubre sus artículos en el blog de Fmasonline.